De regreso a Asia

Un chino le roba 5,000 yuanes a una estudiante. La noticia apareció en el periódico South China Morning Post del sábado 26 de septiembre de 2015 (edición Hong Kong). Llama la atención que un ladrón online le haya devuelto a su víctima la mitad de lo que le había robado. ¿Habrá ladrones que se compadezcan en México o latinoamérica? Quizás hace algunas décades existió algún ladrón con remordimientos de conciencia. Sobre la nota (traduzco): ZHEJIANG - Una estudiante que fue estafada con 5,000 yuanes cuando compraba online se sorprendió cuando el perpetrador le ofreció regresarle 2,500 yuanes porque había sido ''muy inocente''. La estudiante de 17 años de la Universidad Normal de Zhejiang declaró a la policía que hacía unos días había recibido una llamada telefónica de un hombre  que le dijo que había un problema con su pago online en taobao.com y le pidió que le proporcionara detalles de la cuenta de banco para una devolución. Ella hizo lo que le pidió. No se dio cu

Me sumerjo En el abono oscuro de la noche para que germinen mis sueños En su corta vida de insecto nocturno Germinen y se inflen Como burbujas en el aire Y al florecer me deboren Para renacer de nuevo En el alba moribunda de mis sueños.

ESPERA CERTERA, INCERTIDUMBRE IMPACIENTE ¿Qué es una espera certera de un documento prometido  en una fecha agendada? Para el que promete la fecha acaso sólo una fecha en el calendario. Para el que espera la fecha un engrane para insertar  su vida en la vida cotidiana. La voz se agota de insistir  que la fecha prometida se cumpliera ... y en mis manos aún vacías de jornadas honkonesas hurtan el futuro con riesgo de perderlo. No hay reclamo que pueda detenerlo. Con un solo ojo nos mira el destino en el ir y venir del sol-la luna, luna-sol Y el humano con sus ojos de luz no es capaz de ver lo que el destino nos augura.  Lunas van y lunas vienen arrojando mi piel sobre la noche esa piel que en la espera desespera a fuerza del paso de los soles que engranan perfecto y se mantienen sin prisa, sin lamento, sin promesas.

Estos últimos días he estado atorado mentalmente entre la espera de la visa (con riesgo de perder la oferta de trabajo que ya había asegurado...) y el cambio de mini-cuarto. Los espacios en Hong Kong son increíblemente pequeños. Dejé el mini-cuarto anterior para ganar un poquito de espacio en el nuevo cuartito. Afortunadamente ayer domingo encontré la manera de ganar un poquito de espacio. Saqué el colchón, y el lugar para dormir lo adapté para mi mini-mini-estudio. Al menos tengo al alcance mis pocos libros y libretas. Hoy lunes hace ya ocho días que me cambié, de Sai Ying Pun a North Point. Algo que extraño es el parque Sun Yat Sen. Al salir y despedirme de Vicky y Sulis, las que se encargan de mantener los edificios de dormitorios, me dio un poco de nostalgia. Y pude sentir brevemente cómo vamos dejando la piel por los lugares que uno va pasando. Como si se atorara la piel por alambrados que uno tiene que pasar de un lugar a otro. Ahora estoy en el piso 14. Como si fueran 14 c

Ahora me alcanza la nostalgia. En el mes de las ‘fiestas’ patrias. Y en la lejanía, tristemente veo desfilar noticia tras noticia de cada vez peores condiciones para mi querido México. Veo la foto delos priistas del Artículo “Un gobierno que se hunde” de Pablo Gómez, en el portal de Carmen Aristegui y no veo más que prepotencia, desinterés por el pueblo, preponderancia… Mi último mal rato (en enero de 2009) que me tocó vivir de cerca con los priistas fue cuando el entonces rector de la Universidad Intercultural del Estado de Puebla me dejaba sin contrato injustificadamente, apenas un semestre después de regresar de un intercambio Fulbrigh-García Robles. La intención era no recontratarme desde el momento en que regresaba, pues a su manera de ver estaba reincorporándome con más de tres días de ausencia. Salía a fines de junio de Plattsburgh, NY; y al hacer el cambio de vuelo en Nueva York, Aeroméxico ya no nos dejó abordar. El pasaporte de mi niño Alejandro estaba vencido. Era un

Siguiendo con el mes (lunar) de muertos. Desde hace unas semanas observé cómo en la tarde ponían incienso en la entrada de algunos negocios al momento de cerrar. Y también algunas frutas o comida y agua. Las frutas suelen ser enormes toronjas o naranjas o manzanas. Algunas tardes me tocó observar que quemaban algo en botes pintados de rojo. No tengo idea qué es lo que queman. Pero debe tener relación con el ritual de los muertos. Es como si la visita de los ancestros fuera temerosa y entonces protegen sus negociosos de las malas vibras, de las malas energías. Como si esa otra dimensión fuera a desatar alguna furia si no se le muestra mucho respeto. En el festival que estuvieron ofreciendo en el parque Sun Yat Sen había una pared con divisiones que aparentaban nichos u ofrendas individuales, o quizás por familias. Algunas secciones de la parte inferior tenían dibujos de personas vestidas con ropa tradicional. Les veía un parecido enorme a algunas vestimentas tradicionales de Mé

En estos días me ha tocado ver actividades del festival del mes de los muertos en Hong Kong. Algunas obras de teatro que pude observar el domingo pasado me dejaban ver el dedicado trabajo en el maquillaje de los actores y actrices; así como la elaboración del vestuario desde los zapatos (generalmente de madera con adornos pintados a mano). Las telas multicolores, la barba de uno de los personajes, que más bien era el bigote crecido en barba formando una cortina en el pecho que dejaba traslucir el adorno que portaba en la ropa a la altura del pecho. Quizás representaba a un rey, o a un dios. Los diferentes actos, siempre mostraban alguna discusión o reclamo y hasta lucha entre los personajes. Por supuesto que no entendí nada de lo que decían, excepto por algunos ‘hen hwa’ y los pronombres yo (wo), tu (ni) que alcancé a distinguir. La actuación siempre estuvo acompañada de sonidos y luces, que daban la idea de los cambios de acción. Pero esos maquillajes me hacían sentir viajar a