Hong Kong se ha resistido a integrarme en la vida cotidiana. No me queda más que seguir esperando otros amaneceres hongkoneses mientras el último trámite (espero) llega a mis manos y entonces se pueda oficialmente firmar el contrato para Asistente de español en South Island School. Es un tiempo parcial, pero me ha permitido tranquilizar mi espíritu para iniciar mi estancia en Hong Kong este año. La escuela se encuentra de vacaciones esta semana. Por lo que necesariamente, y si todo marcha bien, me estaré integrando en la última semana de octubre.

Mientras tanto sigo observando Hong Kong, escribiendo algún poema por aquí, alguna idea por acá, buscando potenciales estudiantes para clases privadas. Y así se va acercando el fin de año, sin detener el paso el año se acaba. Sin embargo, me tocará vivir dos fines de año; uno con el calendario occidental, y otro con el calendario chino.

Todos Santos se acerca en México y otros lugares, entremezclado con el invasivo Halloween. Celebración que no dejo de añorar desde las lejanías. De alguna manera les tendré que dar la bienvenida a mis antepasados en noviembre...



Comentarios

Entradas populares